Nuestros ojos son nuestro bien más preciado. Sea cual sea la intensidad de la luz solar, o de la luz difusa, las nubes y la bruma no filtran bien todos los rayos UV, por eso todos debemos protegernos de sus posibles consecuencias.
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| Gafas de Sol |
1. Evite exponerse al brillo solar cuando este se encuentre en su punto más elevado, es decir, entre el mediodía y las 4 de la tarde.
2. Nunca mire directamente al sol. Use anteojos oscuros con filtros UV (ultravioleta). De lo contrario podría desarrollar algunas enfermedades oculares como cataratas, conjuntivitis o incluso cáncer.
3. Muchos de los lentes de sol no cuentan con los filtros adecuados para rayos UV. Evite comprarlos en puestos de comercio ambulatorio. Procure adquirirlos en establecimientos de garantía.
4. Recuerde que los niños también deben usar gafas con filtro UV. Además, puede atenuar los efectos producidos por la exposición solar usando un gorro o visera.
5. Si usa lentes de contacto, evite tomar sol o ingresar al agua con ellos. El uso de estos lentes en piscinas y playas incrementa la sequedad ocular.
6. Si arena o algún producto químico entra accidentalmente en contacto con sus ojos, lávelos con abundante agua. En caso de alguna irritación, utilice lágrimas artificiales sin conservantes.
7. Extreme las precauciones higiénicas con los más pequeños de la casa. La manipulación de los ojos con las manos sucias puede causar problemas oftalmológicos.
8. Si aparece algún síntoma o molestia, no dude en acudir a un servicio de urgencias o consulte con un oftalmólogo a la brevedad posible.
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